La Fuerza de Guerra Naval Especial entrega una tonelada de alimentos a Cáritas en Caravaca de la Cruz

Entre los días 17 y 19 de diciembre, la Fuerza de Guerra Naval Especial ha recorrido una distancia de 100 km en dos noches consecutivas para llevar hasta la población de Caravaca de la Cruz (Murcia), una tonelada de alimentos repartida entre las mochilas de sus componentes.

Todos estos alimentos se han conseguido gracias a la extraordinaria colaboración solidaria de donantes anónimos a través de las parroquias María Reina de los Corazones (Polígono Residencial de Santa Ana), San Antonio María Claret y Parroquia Castrense, todas de la ciudad de Cartagena. Así mismo, se han recibido donaciones individuales y el apoyo y aportación del grupo de alimentación “Upper/Spar”.

Esta es la segunda edición de este acto solidario de entrega alimentos que nace del deseo de la propia FGNE. Así un año más, la organiza, planea y ejecuta para que en estas fechas señaladas aquellas personas y familias más desfavorecidas, puedan disponer de alimentos de primera necesidad. La FGNE ha bautizado esta actividad como “Operación Tonelada Solidaria Especial”. En esta edición la marcha se ha ejecutado en dos etapas.

Una dificultad añadida este año, ha sido que un tercio de sus efectivos se encuentra desplegado en el exterior, por lo que cada militar ha transportado en su mochila de combate, junto al resto de su material, una mayor cantidad de comida respecto a la transportada el año anterior, que fueron 10kg por persona. Todos estos alimentos han sido entregados a la representante de Cáritas en Caravaca de la Cruz.

Este año ha participado el personal que ha finalizado el curso de Guerra Naval Especial y se incorpora a la Unidad, de forma que su primera misión ha sido en apoyo de los más desfavorecidos, y que una vez cumplida, y ya en la fortaleza santuario se les han impuesto las “boinas verdes”.

La imposición de la boina verde por parte de un padrino, símbolo tradicional de la Unidad, representa que los nuevos componentes de la Unidad aceptan el espíritu de sacrificio y entrega propio de los boinas verdes de la Armada, renunciando a las aspiraciones personales en pro de las del equipo.